Parque de Cabárceno con niños

Como siempre hemos dicho, un viaje con niños hay que enfocarlo desde otro ángulo distinto para que los más peques de la familia se entretengan al igual que nosotros. Tenéis que empezar a olvidaros de esas jornadas interminables en las que te levantabas a las 7 de la mañana y te acostabas a las 11 de la noche en la que solo se paraba para comer y cenar. Si hacéis esto con niños, no duraréis más de dos días. Los niños necesitan otro ritmo de viaje así como su tiempo para jugar. Además, tenéis que realizar actividades en las que ellos sientan que están disfrutando plenamente ya que es la única manera de que se ilusionen en un viaje.  En nuestro viaje en coche a Cantabria, teníamos un objetivo en mente: visitar sí o sí el Parque de Cabárceno.

Yo (Oscar) lo visité con mis padres cuando era un crío y la verdad es que me encantó, así que queríamos que ahora, Daniel y Hugo tuvieran esa oportunidad que yo tuve cuando era pequeño y que viesen todo tipo de animales en semilibertad aprendiendo de ellos y de todo lo que el reino animal significa. A toro pasado podemos decir que fue todo un acierto y que visitar el Parque de Cabárceno con niños (e incluso sin ellos) debe ser algo obligatorio en vuestro viaje a Cantabria.

Parque de Cabárceno, no confundir con un zoo

Desde Latitudes Infinitas, siempre abogamos por un turismo responsable. Ello implica desde no ensuciar los lugares que visitamos, hasta respetar el bienestar animal siempre (o al menos lo intentamos). Por ello, antes de visitar cualquier recinto en el que existan animales, siempre investigamos un poco para ver las condiciones en las que viven. Cabárceno no fue una excepción y realizamos un sondeo de opiniones para ver si aquel recinto idílico que yo visitara allá por finales de los 90s, seguía siendo un paraíso animal. Efectivamente, todo el mundo seguía hablando bondades de Cabárceno por lo que finalmente decidimos incluirlo, para alegría de Daniel y Hugo, en nuestro itinerario.

Cabárceno no es un zoo al uso. Los animales disfrutan de amplias extensiones de terreno (obviamente no tanto como si estuviesen en libertad) en las que animal puede hacer una vida lo más parecida a su estado salvaje.  Tanto es así que, por ejemplo, nos fuimos sin ver a los hipopótamos ya que estos estaban o bien sumergidos en el lago o bien alejados de miradas indiscretas. Pero así es como debe ser.

Los peques deben entender que un animal no es un juguete y que hay que tratarlo con el máximo respeto posible, y en Cabárceno esto es un mantra que sus trabajadores llevan tatuado.

¿Dónde se encuentra el Parque de Cabárceno?

El Parque de Cabárceno se encuentra situado al sur de Santander, a unos 19 kilómetros de la ciudad. Por ello, si estáis alojados en la capital cántabra, apenas os llevará 15-20 minutos llegar hasta el parque.

Si estáis alojados en San Vicente de la Barquera, como lo estábamos nosotros, os lo encontraréis a unos 60 kilómetros de este bello pueblo costero, o lo que es lo mismo, a unos 35-40 minutos en coche.

Nuestra recomendación es que vayáis en coche sí o sí, ya que el parque es enorme y es prácticamente imposible visitarlo a pie. De hecho está perfectamente preparado para visitarlo en coche.

Recomendaciones para visitar el Parque de Cabárceno

Os voy a intentar dar algunas recomendaciones/consejos para hacer lo más amena y divertida posible vuestra visita al Parque de Cabárceno.

1. Como os he dicho hace unas líneas, id con coche ya que de otra manera no vais a disfrutar la visita debido a la amplia extensión del parque. Si decidís visitarlo a pie, vais a estar más tiempo andando que viendo animales, por lo que la visita se os hará muy pesada. No os planteéis otra cosa que no sea el coche.
2. Según nuestra experiencia, no hace falta realizar una reserva previa de las entradas. En la misma entrada del parque, existen numerosas cabinas desde las que podréis comprar las entradas sin ni siquiera bajaros del coche. Al menos, cuando lo visitamos nosotros (Julio de 2021), no nos encontramos ningún problema ni grandes colas para acceder al parque.
3. Dedicadle un día completo. Puede parecer demasiado, pero la amplia extensión del parque así como la gran multitud de animales invitan a dedicarle un día al completo
4. ¡¡Usad el teleférico!! Para que os hagáis una idea de la extensión del parque, existen incluso dos líneas de teleféricos que os llevará cerca de una hora recorrerlas en su totalidad. La experiencia de ver los animales desde las alturas bien lo merece.
5. Madrugad para verlo. Cuanto antes lleguéis al parque, menos colas encontraréis, más tiempo podréis pasar en las instalaciones y más activos encontraréis a los animales
6. Podéis llevaros comida y bebida . El Parque de Cabárceno cuenta con algún que otro restaurante y cafetería pero todos ellos se encuentran en la periferia del parque, por lo que, si estáis lejos de ellos, os tocará subir al coche para ir a comer. Además, los restaurantes, como ya imaginaréis están hasta los topes en época de vacaciones por lo que es probable que tengáis que esperar.

Cuanto cuesta visitar el Parque de Cabárceno

El Parque de Cabárceno, tiene cuatro precios distintos dependiendo de la temporada en que lo visites y que son los que os expongo a continuación:

• Temporada baja. Va desde el 01 de Octubre al 31 de Marzo. Esta temporada solo aplica de Lunes a Viernes y tiene un precio de 20€ para los adultos y 10€ para los niños.
• Temporada media. Al igual que en la temporada baja, va desde el 01 de Octubre al 31 de Marzo pero solo aplica a los fines de semana. El precio es de 24€ para los adultos y 14€ para los niños
• Temporada media-alta. Va desde el 01 de Abril al 30 de Septiembre de lunes a domingo. El precio es de 32€ para los adultos y de 18€ para los niños.
• Temporada alta. Va del 15 de Julio al 31 de Agosto y Semana Santa. El precio es de 39€ para los adultos y de 21.5€ para los niños

Debéis saber que los niños de entre 0 y 3 años pueden entrar gratuitamente al parque. Como veis, la diferencia entre las temporadas es bastante grande, existiendo una diferencia de más del 50% entre la temporada baja y la alta.

Os recomiendo visitar la web oficial del Parque de Cabárceno para consultar los precios actualizados.

Qué animales podemos ver en el Parque de Cabárceno

Cuando una va con niños, espera ver todo tipo de animales para que los más peques de la familia puedan disfrutar de ellos. En Cabárceno existen infinidad de animales, desde los más típicos a los más raros de ver.

Nada más entrar al parque con vuestro coche, os recomiendo que aparquéis en el aparcamiento que os encontraréis a mano izquierda. Allí os encontraréis con una zona donde podéis ver enormes tortugas de tierra.

Justo enfrente tenéis el reptilario donde podréis ver gran cantidad de serpientes y otros reptiles e insectos. La verdad es que hay enormes serpientes que imponen bastante respeto. Como consejo os diré que intentéis verlo nada más entrar ya que se forma bastante cola. Si ya os habéis encontrado mucha cola para entrar, dejadlo para el final del día donde seguro habrá mucha menos gente ya que el reptilario es lo primero que te encuentras nada más entrar al parque por lo que es lo primero que todo la gente ve.

Tras estas dos visitas, lo siguiente digno de mención es la zona de los gorilas. Se trata de una gran zona al aire libre (con sus zonas a cubierto) donde los gorilas hacen su vida diaria ajenos, aparentemente, al ajetreo de turistas que se asoman a su recinto para tomar una foto de esos enormes animales. Uno de nuestros sueños por cumplir es poder verlos en libertad en Uganda, pero de momento eso tendrá que esperar.

Tras ver algún la zona de los tigres, llegamos al recinto de los osos. Probablemente se trate del recinto más espectacular por su enorme terreno. Los osos tienen una grandísima extensión de tierra y rocas donde poder cobijarse de las miradas de los turistas. Aún así no os preocupéis, hay suficientes osos como para ver alguno casi seguro.

El siguiente gran recinto es el que aúna la fauna africana. Se trata de otra gigantesca extensión de terreno donde avestruces, antílopes y jirafas, entre otros, comparten vida. Somos conscientes de que verlos en libertad en un safari por África debe ser inigualable, pero mientras llega ese día, nos conformamos con verlos en semilibertad.

Volvemos a subirnos al coche para acercarnos a la zona en la que viven por un lado los monos y por otro los leones. Vuelven a ser grandísimas extensiones de terrenos donde simular la libertad de la que los animales deben disfrutar.

Por supuesto, en el Parque de Cabárceno no faltan las típicas exhibiciones de animales. Existen dos, la primera de ellas es la de las focas y leones marinos. Tiene lugar justo al lado donde se encuentran las tortugas y el reptilario (nosotros no la pudimos ver porque nos encontrábamos en la otra punta del parque en el momento de la exhibición). La otra, que sí pudimos ver, es la de las aves rapaces. En ella, los adiestradores nos cuentan características de las aves que están enseñando y realizan una pequeña exhibición de vuelo de todas ellas. Es realmente espectacular ver como las águilas se lanzan en picado sobre la comida que sus adiestradores les ofrecen. E igualmente, impresiona ver de cerca el tamaño de una de las joyas de nuestra fauna, los buitres.

Como hemos dicho al principio, hay algunas zonas que son tan amplias, que es posible que os vayáis de ellas sin ver a los animales que deberían estar. Eso es lo que nos pasó con los hipopótamos. Intentamos verlos de todas maneras posibles pero no hubo manera de que diesen la cara. Al subirnos al teleférico entendimos por qué. Vuelve a tratarse de una amplísima zona con un lago en el que, seguro estaban mimetizados o simplemente resguardándose del intenso calor que hizo ese día.

Por supuesto, existen infinidad más de animales, pero no es el objetivo de este artículo mostraros todos y cada de los animales que integran el Parque de Cabárceno.

En resumen, el Parque de Cabárceno es una visita ideal para hacer que los más peques de la familia disfruten del viaje con actividades orientadas a ellos. Si a ello le sumas que los animales se encuentran en unas condiciones óptimas, estaremos ayudando además a que lugares como este se conviertan en ejemplos de cómo tratar a los animales que tanto queremos.