Una de las zonas más frecuentadas de los pasajeros
Suecia,  Estonia,  Finlandia,  Rusia

A bordo del Costa Mágica

Comienza nuestro crucero

Llegaba el día. Ese día que llevábamos esperando mucho tiempo (sobre todo Laura). Ese día en el que probaríamos una nueva manera de viajar. Nos convertiríamos durante 7 días en unos caracoles. Siempre con la casa a cuesta.

Desde que conozco a Laura, siempre me ha estado comentando de hacer algún año un crucero. Debo reconocer, que era muy reacio a ellos, y por ello lo hemos ido postergando hasta que llegase el momento ideal. Pues bien, ese momento ideal había llegado.

Una vista de nuestro crucero

Cuando uno viaja con niños, se da cuenta de que es un poco más difícil prácticamente cualquier cosa (que no imposible). Comidas, desplazamientos, alojamientos, todo tiene un plus que no teníamos cuando viajábamos solos. 

Con un crucero, todo esto está solucionado (pagando su sobre coste, obviamente). Además, si viajas con niños, en la gran mayoría de navieras, los menores de 3/4 años viajan gratis (tan sólo tendréis que pagar las tasas portuarias).

Tras este rollo, vamos a lo bueno. ¡¡Comenzaba nuestro crucero!!

¿Donde y cómo reservar un crucero con Costa Cruceros?

El «donde» lo teníamos claro, donde más económico nos saliese. Estuvimos sondeando varias webs, incluido por supuesto la web oficial de Costa Cruceros, pero finalmente nos decidimos por la web Solo Cruceros, debido a que era la que mejor precio nos ofrecía.

Una de las zonas más frecuentadas de los pasajeros

Ya teníamos el «donde», ahora faltaba el «cómo». La verdad es que en Solo Cruceros todo fueron facilidades. Nos dieron la opción de contratarlo en la web o vía telefónica. Finalmente lo hicimos vía telefónica ya que así íbamos resolviendo las dudas que teníamos sobre la marcha.

Tras unas cuantas llamadas, ya teníamos nuestro crucero reservado.

Opinión Solo Cruceros

Solo Cruceros es una especie de buscador especializado en cruceros, desde donde es posible reservar el crucero en el que estés interesado.

En cuanto a precio, en nuestro caso fue la compañía que mejor precio nos ofreció.

En cuanto a servicio de atención al cliente….depende de la fase en la que nos encontremos. Si todavía no hemos contratado el crucero, es una empresa muy atenta, que te llama y manda emails a los 5 minutos de ponerte en contacto con ellos. Peeeeero, todo cambia una vez que has reservado el crucero. En nuestro caso particular, tras haber contratado el crucero, nos surgieron algunas dudas, las cuáles ya no eran resueltas hasta varios días después de escribirles yo. Lo que antes eran minutos, ahora eran días. Lo que antes eran emails que desprendían buenas y amables palabras, ahora eran emails lo más escuetos posibles.

No diré que mi experiencia fue mala, porque no fue así. Pero es cierto, que se nota muchísimo que en cuanto «te han cazado» ya no les interesas tanto.

Aunque inicialmente pensábamos tomar un autobús para ir desde nuestro hotel hasta la terminal de cruceros, finalmente nos decidimos por un taxi ya que íbamos cargados de maletas y carricoches, y lo vimos más cómodo.

Por cierto, debéis saber que Estocolmo tiene varias terminales de ferry. Os recomiendo que visitéis la web oficial del Puerto de Estocolmo, donde podréis consultar desde qué muelle sale vuestro crucero. Una vez que sepáis el nombre del muelle, os vais a la sección Port Map y buscáis donde está dicho muelle.

En apenas 15 minutos, ya estábamos en la terminal desde donde salía nuestro crucero. Bajamos del coche, pagamos, alzamos la vista y allí estaba. Una auténtica bestia esperando que embarcáramos para conocer sus entrañas a fondo. ¡¡La verdad es que no nos lo imaginábamos tan grande!!

Nuestro crucero atracado en el puerto

El proceso para subir al barco es muy sencillo. En la misma terminal (antes de subir al barco) dejas tus maletas junto con las etiquetas que previamente te habrán enviado a tu email. Una vez que hayas dejado tus maletas, también en la misma terminal haréis el check-in. Con vuestro check-in realizado, llega el momento de embarcar. Justo antes de subir por la pasarela del barco, os harán una foto a cada uno de manera que cuando queráis subir y bajar del barco, os puedan identificar fácilmente. Tras estos pequeños trámites, ya podréis subir al barco.

En nuestro caso, nos dijeron que teníamos que esperar por el barco a que los camarotes estuvieran listos (lo avisan por la megafonía del barco). Así que, puesto que teníamos que esperar un rato, decidimos comenzar a explorar nuestro hotel flotante.

Laura posando en una de las cubiertas

Creo que recorrimos casi todas las estancias del barco (¡¡¡y os puedo asegurar que son unas cuantas!!!). Los interiores nos parecieron de una calidad altísima, y todo muy bien decorado.

Comenzando a pasear por el Costa Mágica

El casino del Costa Mágica

Aunque sin duda alguna, lo que más nos impresionó fue el teatro. No nos imaginábamos un espacio tan grande dentro del barco. No le faltaba ningún detalle , es más, nos atreveríamos a decir, que si no sabes que estás en un barco, jamás dirías que este teatro pertenece a un barco.

El teatro del Costa Mágica nos encantó!!

Tras unos cuantos paseos, nos avisaron por megafonía que los camarotes estaban listos. Así que sin pensárnoslo dos veces, fuimos a conocer la que sería nuestra habitación durante siete noches.

Para ser estrictamente sinceros, se queda un poco justa para meter dos carricoches y una cuna. Si quisiéramos algo más grande, ya teníamos que ir a las suites, y la verdad es que la diferencia en precio era muchísima.

Descubriendo nuestro camarote

Detalles de nuestro camarote

Tras dejar las maletas en la habitación, salimos de nuevo para que los peques corriesen y jugasen un rato. Descubrimos en la cubierta superior una pista de baloncesto cubierta con una red. Puesto que no había nadie, dejamos a Daniel y Hugo que se cansaran….digo…que jugaran en la pista….

Daniel y Hugo disfrutando de las instalaciones del Costa Mágica

La verdad es que el día no dio para mucho más. Al día siguiente teníamos un día completo de navegación camino de nuestro siguiente destino, Helsinki.

La verdad es que la primera impresión fue realmente buena, y lo mejor de todo es que… ¡¡¡aún quedaban 6 días por delante!!!

2 Comments

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.