Qué ver en Trevélez, el pueblo más alto de la Península

Tras conocer de primera mano los pueblos más bonitos de la alpujarra, hoy nos vamos a detener en uno de ellos, famoso por ser el más alto de la península ibérica. Hablamos por supuesto de Trevélez y de todas las pequeñas maravillas que se encuentran en él. Es la segunda vez que lo visitamos tras aquella fugaz visita a la alpujarra granadina allá por 2011. Aunque no se trata de un pueblo excesivamente grande, creemos que es ideal para dedicarle una mañana entera. Si estáis pensando en visitarlo, seguid leyendo porque hoy os traemos las mejores cosas que ver en Trevélez.

Trevélez, el guardián de la península

Situado a casi 100 km de Granada, podemos encontrar Trevélez. No obstante, aunque pudiésemos pensar que Trevélez se encuentra eclipsado por la bellísima Granada, es cierto que con sus 1476 metros de altitud, esta pequeña localidad de apenas 800 habitantes tiene el honor de ser considerado como el pueblo más alto de la península, por lo que, desde un punto de vista totalmente metafórico, Trevélez podría ser considerado como el guardián de Granada.

Según los historiadores, debemos remontarnos hasta el siglo III para encontrar los orígenes de Trevélez. El término latino «velex» significa «valle» por lo que podríamos traducir el nombre de Trevélez como Tres Valles.

Tras la conquista del Reino de Granada, los cristianos se adentraron en la Alpujarra pero parece ser que no llegaron a Trevélez. Tras llegar a oídos de los moriscos la conquista, decidieron organizarse y presentar batalla a los cristianos. Dicha revolución no llegó a buen puerto y fueron expulsados allá por el siglo XVI. Para evitar la despoblación de la zona, todos los pueblos de las alpujarras fueron repoblados por andaluces, castellanos y gallegos.

Mejores cosas que ver en Trevélez

Como decimos, Trevélez es un pueblo no muy grande ideal para recorrerlo en una mañana. Podéis combinar una visita al pueblo con alguna ruta de senderismo que parte desde el pueblo, de esta manera os haréis una idea perfecta de lo que puede ofrecer.

Paseo por los alrededores de Trevélez

Al ir con niños, quedaba prácticamente descartada una ruta algo más exigente por las montañas de Trevélez, por lo que necesitábamos encontrar algún paseo no muy largo ideal para hacerlo con niños. Con estos requerimientos, os recomiendo un pequeño paseo que parte desde el lateral de la Iglesia de San Benito.

Con una longitud ida y vuelta de un par de kilómetros, pasaréis por un camino apenas transitado en el que encontraréis un pequeño oasis de naturaleza que discurre paralelo a un pequeño riachuelo del que sólo se escucha el ronroneo del agua prácticamente en todo el recorrido, solo haciéndose visible al final del mismo.

Si seguís el camino hasta el final, llegaréis a un pequeño puente de piedra que salva el riachuelo que veníamos escuchando durante todo el camino.

Además, el camino discurre a lo largo de varias fincas en donde es posible ver algún que otro caballo despistado que hará las delicias de los más peques de la familia, mientras los mayores nos deleitamos con las vistas de Sierra Nevada al fondo. La verdad es que es difícil condensar tanto en apenas un kilómetro de distancia.

Iglesia de San Benito

Construida en el siglo XVIII, como siempre ocurre, consiguió sobrevivir al paso del tiempo prácticamente intacta. Lamentablemente, el conflicto de la Guerra Civil la dañó con severidad tuviendo que ser restaurada en profundidad. La iglesia está consagrada a San Benito, del que se guardaba una imagen nada más entrar al templo. Durante la citada guerra, dicha imagen se perdió y, la que vemos hoy en día, no es más que una réplica. Dicho santo es muy venerado en Trevélez, tanto que sus habitantes celebran una fiesta en su honor cada 11 de Julio.

Por fuera destaca su inmacualada torre blanca que deslumbra bajo los incansables rayos del sol. Es justo desde este lugar donde parte la ruta que os hemos comentado más arriba.

Fuentes de Trevélez

Otra de las mejores cosas que ver en Trevélez son sus fuentes. Debido a su buena situación a los pies del Mulhacén, el agua es de una altísima calidad que viene filtrada directamente desde la montaña (muy diferente al agua que bebemos en la ciudad). Fruto de ello son las fuentes que quedan repartidas a lo largo y ancho de Trevélez como la del Castaño, la del Mulhacén o la de la Placetilla entre muchas otras.

Recorrer sus blancas calles

Para nosotros es, sin ninguna duda, lo mejor de Trevélez. Recorrer sus calles es un placer para los sentidos. Me es imposible recomendaros ninguna en particular porque todas ellas tienen su encanto.

Las calles destacan por sus blancas fachadas, muchas de ellas espectacularmente decoradas con cientos de flores.

La verdad es que somos unos enamorados de este tipo de arquitectura de calles estrechas y encaladas hasta arriba. Además, los vecinos de Trevélez conocen muy bien esto y saben sacarle todo el potencial que tiene su localidad.

Muchas veces, cuando visitamos alguna ciudad o algún pueblo, nos centramos en entrar a museos y todo tipo de edificios sin pararnos a observar lo que nos rodea y, creedme, en los pueblos de la Alpujarra, pasear detenidamente por sus calles es una de las mejores cosas que hacer en Trevélez.

Visitar un secadero de jamón

Probablemente sea el único pueblo de España en el que, al entrar, se percibe un ligero olor a jamón. No, no os habéis vuelto locos ni vuestro sentido del olfato os está jugando una mala pasada. Una de las mayores actividades económicas de Trevélez está dedicada al curado del jamón.

Como hemos comentado antes, Trevélez es el pueblo más alto de la península situado a 1476 metros de altitud. Es por ello que sus condiciones de humedad y de oxígeno son ideales para el curado de uno de los manjares más exquisitos que da nuestra tierra, el jamón ibérico.

Es por ello que, una de las mejores actividades que se puede realizar en Trevélez, es visitar un secadero de jamón para entender, comprender y, por qué no, degustar, una de las exquisiteces que allí se fabrican.

De entre los muchos que allí hay, uno de los más afamados es el Secadero de Jamones Vallejo, que propone unas cuantas opciones de visita entre las que se incluye un curso de inicio al corte del jamón. Sin duda, una experiencia que merece la pena.

Así que, si queréis experimentar las mejores cosas que ver en Trevélez, esta debería ser una de ellas.

Probar la gastronomía alpujarreña

Dudo mucho que a alguien que le guste realmente viajar, no disfrute con la gastronomía del lugar que está visitando.

Pues bien, en la alpujarra granadina, tenéis una de las gastronomías más exquisitas de cuantas existen en España, y eso que, en general, la gastronomía de nuestro país está a otro nivel de la del resto del mundo (para mi gusto tan solo comparable con la DELICIOSA gastronomía japonesa).

Esta zona de las alpujarras destaca por su contundente comida, imagino que, para calentar el cuerpo en los días más fríos. Allí, las patatas, los huevos, los chorizos, las morcillas y, por supuesto, el jamón son los grandes dominadores de los platos alpujarreños. ¿Imagináis todo esto en un mismo plato? Pues por supuesto que existe y, además, se trata del plato estrella de las alpujarras. A esta bestia calórica se le conoce como Plato Alpujarreño, aunque cada restaurante le da su toque distintivo.

Hay multitud de restaurantes en Trevélez y me atrevería a decir que todos ellos sirven esta exquisitez. Me vais a permitir que os recomiende uno de ellos (que fue donde nosotros comimos). El restaurante en cuestión se llama Nuevo González y está situado en la carretera principal nada más cruzar el puente a mano derecha. Os recomiendo subir a la terraza donde se está de lujo y encima tendréis unas bonitas vistas de Trevélez.

Donde alojarse (y donde no) en Trevélez

Obviamente, Trevélez no destaca por sus grandes hoteles ni nada que se le parezca. Aquí tenemos que hablar de alojamiento rural, bien sea en casas rurales o en alguno de sus campings cercanos.

Cualquiera de las dos opciones son buenas aunque yo os voy a hablar de la que escogimos nosotros, una cabaña en el camping Trevélez.

Se trata del camping más cercano a Trevélez situado a apenas un kilómetro de distancia de la localidad. Tenéis las clásicas opciones de parcelas para montar vuestra tienda de campaña o para estacionar vuestra caravana o autocaravana. Además, dicho cámping también cuenta con pequeñas cabañas en las que podéis alojaros. Esta última opción fue la que elegimos nosotros, más concretamente la cabaña llamada Veleta (con cocina incluída).

*Foto obtenida de la web del Cámping de Trevelez

Pues bien, lo que en principio parecía una buena idea no lo fue tanto ya que la cabaña, a pesar de lo bonita que se ve en las fotos, dista bastante de lo que podríamos considerar un buen alojamiento. Sin ninguna duda, el baño era lo peor.

La puerta no cerraba y, aunque estamos en familia, siempre da gusto un poco de intimidad. La mampara de la ducha era un auténtico desastre a punto de caerse por estar rota y arreglada chapuceramente con un tornillo. La ducha perdía agua lo que hacía que el baño quedase convertido en una minipiscina. Las mosquiteras tuvieron su función años atrás, ahora, simplemente se reducían a una red enmarañada completamente inútil. La escueta ventana del baño no cerraba debido a los desajustes del montaje.

Pero eso no es todo. La cocina, en una minúscula cabaña aparte y bastante desvencijada por el paso del tiempo, era hasta peligrosa ya que, para fijar el techo usaron clavos bastante largos que sobresalían hacia las cabezas sin tener la precaución de cortarlos o, por lo menos, doblarlos para evitar cualquier peligro.

En fin, si vais a este cámping, evitad a toda costa alojaros en esta cabaña ya que no está en condiciones de ningún tipo de estancia.

Creo que es la primera vez que hago una crítica negativa de un alojamiento pero es que esta cabaña lo merece muy a nuestro pesar.

Qué ver cerca de Trevélez

Como ya hemos comentado, Trevélez es un pueblo pequeñito que se ve en una mañana. Es por ello que, lo mejor es combinarlo con otras visitas para realizar en el mismo día o para hacer una escapada de 2 o 3 días en la que poder descubrir los pueblos más bonitos de la Alpujarra.

Si lo que queréis es hacer turismo rural, lo mejor sin duda es dedicar un par de días a conocer los que, para nosotros, son los pueblos más bonitos de la zona.

En primer lugar, os propongo 3 pueblos que, por estar muy cerca el uno del otro, se trata de una visita ideal para realizar en un día. Estos son, como no podía ser de otra manera, Capileira, Bubión y, el que para nosotros, es el más bonito de la zona, Pampaneira.

En segundo lugar, os proponemos el curioso pueblo de las brujas, en el que estos personajes no dan miedo si no que son el gran atractivo del pueblo. Hablamos de Soportújar.

En tercer lugar, os recomendamos una visita a Órgiva, capital de la comarca de la Alpujarra y que, si tenéis tiempo, se trata de una visita recomendable, aunque para nuestro gusto no es tan imprescindible como el resto.

Por último, y no menos importante, os recomendamos que dediquéis unas horas a visitar un pueblo conocido por sus aguas en el que, cada fuente del pueblo, tiene su razón de ser. No podíamos hablar de otro sino de Lanjarón.

Con esto nos despedimos hasta la próxima. Recordad, Trevélez es ese pueblo que hay verlo, sentirlo y, sobre todo degustarlo. Un pueblo que, estamos seguros, os dejará un estupendo sabor de boca (¡¡en todos los sentidos!!).

¡¡Hasta la próxima!!